Oh que belleza la pupila que mira
La mano que suavemente acaricia
El relieve divino de tu dulce esencia
El  leve calor  que tu piel destila
 
 
Embriagado de cielo al posar mí silencio
Al tomar tus alientos en mi ser interno
Al sudar en tu pecho mojando tu ceno
Aceptando el vacio feliz de tenerlo
 
 
Embebido de ti en tu celo perplejo
Cual nonato unido al vientre materno
Entumecido del cielo, mudo de intentos
Asumo el delirio que me causa tu empeño
 
 
Acalorado, pasivo en defensa activo
Me viertes tu esmero atacando el frio
no hay tregua que me salve hendido 
de tu ansia que pena en éxtasis tardío
 
 
C. Q
 
 
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Muchas gracias por comentar se aceptan todas las criticas con la intención salida del corazón , de la introspectiva
Gracias de nuevo